Desde 50 sombras de Grey hasta cualquier video porno en Internet, ahorcar durante el sexo parece una práctica fácil, erótica y muy pasional. Como si pudiera pasar sin planificación.
Sin embargo, algunos estudios describen que la asfixia erótica es una de las prácticas sexuales más peligrosas.
Eso no significa que está bien o mal. Como explica el psicólogo David Wahl, cualquier acto sexual entre adultos que han dado consentimiento no puede ser juzgado.
Sin embargo, entenderlo y encontrar maneras más seguras de hacerlo puede ayudarte a tener experiencias más positivas.
Así que comencemos.
¿Qué es la asfixia erótica?
De acuerdo a la sexóloga Lindsey Doe, la asfixia erótica, o ahorcar durante el sexo, es el acto CONSENSUADO, de cortar el sumistro de aire de alguien más o el tuyo propio.
Una investigación del 2005, determina que las cuatro maneras más comunes de hacerlo son:
1.Compresión en el cuello.
2.Asfixiar con objetos, por ejemplo fundas plásticas o correas.
3.Compresión en el pecho, conocido en inglés como corseting. Es decir, cortar el suministro de aire a los pulmones como lo hace un corset.
4.Inhalar otro gas para excluir al oxígeno. Por ejemplo exhalar continuamente en la nariz de una persona para que solo respire dióxido de carbono.
Hay razones físicas y psicológicas por las que muchas personas se animan a intentarlo.
Razones físicas
En un estudio de 2018 a 137 personas que practicas ahorcar durante el sexo, algunas de las motivaciones más comunes eran:
Uno. Ahorcar resultaba erótico.
Dos. Elevaba el nivel de confianza en pareja.
Tres. Curiosidad.
Cuatro. Sentimientos de placer por el riesgo y pánico del acto.
Cinco. Su pareja les resultaba más atractiva por querer intentarlo.
Seis. Ahorcar potenciaba el placer durante el orgasmo.
Razones psicológicas
En este mismo estudio se llegó a la conclusión de que algunas razones psicológicas por las que la spersonas se animaron a intentar asfixia erótica fueron:
Fantasía. A muchos participantes no les parecía muy agradable el acto de ahorcar durante el sexo por si solo.
Sin embargo, el riesgo de esta práctica cumplía con fantasías de las personas de acostarse con alguien peligroso. Incluso podían hacer juegos de roles con su pareja donde eran sometidos por alguien que los castigaba asfixiándolos.
Endorfinas. Una vez que recuperas el aire después de ser asfixiado, el cerebro libera endorfinas. Esta sustancia del cerebro que genera placer y bienestar potencia la experiencia sexual.
Tabús. Para muchas personas, el hecho de que una práctica se considere “prohibida” o “peligrosa” es suficiente para crear un deseo profundo por intentarlas.
El problema de la asfixia erótica
Como ya te contamos antes, ahorcar durante el sexo tiene un gran problema: es demasiado riesgoso.
De acuerdo a un estudio del 2021, la asfixia sexual fue denominada una de las prácticas más peligrosas, ya que es de las pocas que pueden terminar en una muerte. Incluso si lo haces bien.
Muchos lugares donde se practica BDSM (Bondage, Disciplina, Sumisión, Masoquismo), tienen absolutamente prohibida esta práctica es sus encuentros.
El problema, de acuerdo al instructor de sadomasoquismo David Pillow, es que las películas y libros lo han romanizado demasiado.
Como resultado, la gente lo ve como una mera fantasía, y no como una práctica de alto riesgo que puede causar daños permanentes.
¿Cómo ahorcar de manera segura?
De acuerdo a la sexóloga Lindsey Doe, no hay manera totalmente segura de ahorcar. Sin embargo, hay técnicas para reducir el peligro.
Mide el riesgo. Ten presente que prácticas son más riesgosas a la hora de asfixiar y decide con cuál te sientes más cómoda.
Aquí te dejamos una pirámide de qué prácticas son más peligrosas de acuerdo a la sexóloga Doe.
Ilustración por Daniela Hidalgo, basado en información de la sexóloga Lindsey Doe.
Señales de seguridad. Esta es una práctica que necesita mucha comunicación y consentimiento. Establece con tu pareja hasta que límites quieres llegar. Tal vez solo quieres que lo haga con las manos, pero no con un objeto.
También establezcan señales con las manos para indicar si están bien o si necesitan parar. Pueden ser golpes, movimientos, golpear el hombro de tu pareja o lo que necesites.
Pequeño dato: para las personas que hacen esta práctica frecuentemente, la doctora Lindsey Doe, explica que es mejor tener un consentimiento por escrito, en caso de que algo salga mal y alguien muera.
Un poco oscuro, sí. Pero es un acto responsable y seguro durante esta práctica.
No hacerlo por mucho tiempo. En el caso de asfixiar con las manos, la doctora Doe, recomienda no sujetar el cuello por largos periodos.
Mejor, haz apretones cortos y repetidos.
También puedes aprender a identificar cuando tu pareja va a venir para solo ahorcar el momento del orgasmo. Ahí también pueden usar unas de sus señales con las manos.
No cubras las cara totalmente. Si vas a usar almohadas u otro objeto para asfixiar cubriendo la cara, práctica contacto visual.
Cubrir totalmente la cara no te da señales de si una persona se está quedando inconsciente o ya lo hizo.
Comienza cubriendo solo nariz y boca y aprendan a identificar señales de cuándo parar o seguir.
De menos a más. Si esta es una práctica en la que estás interesada, lo mejor es siempre ir subiendo poco a poco de nivel.
No uses toda tu fuerza de primerazo, siempre revisa cómo te sientes después de algunas horas. Recuerda que puedes ahogarte incluso después de la práctica por daños a la tráquea, explica la doctora, Doe.
Intenta simular una asfixia erótica. De acuerdo a la doctora Doe, muchas personas realmente no quieren ser asfixiadas. Solo quieren simular hacerlo sintiendo las manos de alguien en su cuello.
Tal vez este es tu caso, por lo que puedes pedirle a tu pareja que solo coloque sus manos y apriete ligeramente, sin cortar totalmente tu suministro de aire.
Incluso puedes solo fantasear con hacerlo y tener una versión en solitario dejando volar tu imaginación.
Para más información sobre ahorcar durante el sexo, mira esta guía de la Doctora Lindsey Doe. Recuerda activar los subtítulos.
