Tener sexo con ansiedad, o ansiedad sexual, se define como la preocupación excesiva por tener un “buen rendimiento” durante el sexo, explica la terapeuta sexual Candice Cooper-Lovett.
Las causas que provocan esta pelea entre la salud mental y sexo, tienen varios orígenes.
Algunos son:
- Baja autoestima sobre la apariencia física.
- Disfunciones sexuales como ‘que no se te pare’ o líbido muy bajo.
Pd: Ninguna es una razón para creer que estás dañado, que necesitas “arreglo”, o que eres anormal. De hecho ambas son bastante recurrentes y puedes tratarlas con ayuda profesional.
3. Abusos sexuales en el pasado.
4. Problemas de pareja como poca compatibilidad, peleas, problemas sentimentales.
Sin contar el abuso sexual, la educadora sexual Amy Jo Goddard explica que estos miedos se originan en la falta de educación sexual y expectativas falsas sobre cómo debería ser el sexo.
“Que debe durar mucho”, “siempre debe haber penetración”, “debe terminar en un orgasmo”, “debo gemir mucho y si soy hombre, no debo gemir”.
Stop. Esto no es obligatorio. En algunos casos, ni siquiera es posible.
Por eso, te dejamos algunos consejos para manejar de mejor manera tu ansiedad sexual y encaminarte a un sexo sano, real y seguro.
Practica a solas
La masturbación o autoerotización es un mecanismo para descubrir sensaciones placenteras en un ambiente seguro, explica la terapeuta Cooper-Lovett.
De esta manera, puedes enfocarte más en lo que se siente bien y diferenciar qué tipo de toques no quieres que tu pareja intente.
Puedes comunicar esta información cuando vayas a tener relaciones con otra persona y así mejorar la experiencia basada en tus gustos.
Busca ayuda de un terapeuta
El sitio de terapia sexual Blue Heart, recomienda buscar ayuda de un profesional de la salud mental para reducir la ansiedad sexual.
En terapia, puedes tratar, con técnicas autorizadas, situaciones como abuso sexual.
Además, puedes llegar al origen de las causas que denotan el sexo con ansiedad. Por ejemplo la falta de autoestima, que de acuerdo a un estudio un tercio de las mujeres la padecen y que impacta notablemente su satisfacción sexual con su pareja.
Rompe con las expectativas
Todos en nuestra cabeza tenemos ideas sobre cómo “debería” funcionar el sexo, o cómo se supone que se debe ver un encuentro sexual.
Las falsas expectativas y mitos son grandes factores que influyen en el sexo con ansiedad, explica la educadora sexual Amy Jo Goddard.
Por eso, Goddard recomienda educarte en las prácticas que te gustan o no para definir tu propio tipo de sexo. Recuerda que no existe un estándar.
Tal vez te gustan más las caricias o los roces, entonces busca información sobre zonas erógenas en el cuerpo.
Si no te gusta la penetración, no significa que “no te gusta el sexo”. Mejor lee un par de libros sobre prácticas como sexo oral, o Dry Humping.
También puedes acudir a talleres o escuchar charlas de educadores sexuales y romper mitos en tu cabeza que dificultan una buena relación entre tu salud mental y el sexo.
Dedícate a hacer cosas que te gustan
La ansiedad sexual también crece fuera de la habitación. Si otras áreas de tu vida te llenan de estrés, esto puede tener un impacto directo en tu salud sexual, explica Blue Heart.
Intenta, en la medida de lo posible, manejar el estrés que te rodea. Por ejemplo, busca soluciones si no estás durmiendo bien.
Aléjate de cuentas en redes sociales que afecten tu autoestima o pongan expectativas de bellezas imposibles en tu cabeza. Dedícate a tus hobbies, como salir a cambiar o probar un nuevo café con tu mejor amiga.
Pequeños cambios tienen un impacto positivo en tu felicidad personal y hacen más fácil tu camino para aprender a lidiar tener sexo con ansiedad.
