En una estudio publicado por la revista médica American Family Physician para conocer cómo afecta la depresión en el sexo, el 70% de los adultos reportó que sus deseos por tener relaciones sexuales disminuyó.
La depresión y sexo tienen mucho que ver la una con el otro, explica la Clínica Cleveland. Todo comienza en el cerebro. Específicamente, por unos químicos llamados neurotransmisores. Estos son los encargados de comunicar el deseo sexual a tus órganos.
O sea, si tu cerebro recibe un estímulo de deseo, tu cuerpo va a responder incrementando el flujo sanguíneo que resultan en una erección o lubricación vaginal.
Cuando tienes depresión estos químicos están fuera de balance. Entonces, tu deseo sexual puede rebajarse o incluso desaparecer.
También se puede dar por cambios hormonales. Especialmente en las personas de sexo femenino durante la menopausia, después del parto o en la menstruación.
¿Pero cómo afecta la depresión en el sexo directamente?
Inhabilidad de sentir placer
La psiquiatra Mary Kimmel, explica que el estrés, la ansiedad y la culpa tienen un impacto directo en tus ganas de tener sexo (o sea, en tu libido).
Este bajón en el deseo puede tener efectos negativos en tu capacidad para excitarte y alcanzar un orgasmo.
Fatiga
La fatiga es otro de los efectos comunes de la depresión. Si te sientes cansada y sin ánimos constantemente, es difícil conectar con tu pareja y emocionarte por tener sexo con tu pareja, explica Kimmel.
Disfunciones Sexuales
Otra forma en como afecta la depresión en el sexo, es cuando se incrementa la ansiedad por tener disfunciones sexuales.
Por ejemplo, muchas personas tienen disfunción eréctil, lo que resulta en baja autoestima, nerviosismo, disfrutar menos de las relaciones sexuales y por lo tanto, haciendo más grave la depresión.
Desconexión cerebro – órganos sexuales
De acuerdo a Kimmel, la medicación para tratar la depresión alivia los síntomas negativos, ya que estimula la hormona de la felicidad llamada serotonina.
Sin embargo, esta misma medicina previene la comunicación del cerebro con los órganos sexuales.
Como resultado, las personas pueden experimentar dificultades para llegar al orgasmo, eyacular o tener una erección.
Eso sí: no todas las medicinas tienen efectos secundarios que empeoran el sexo con depresión.
Muchas se enfocan en estimular otras hormonas de la felicidad como la dopamina. Por eso sus efectos no son tan fuertes, explica Kimmel.
Qué hacer para mejorar el sexo con depresión
La depresión en general se trata con antidepresivos.
Si crees que tus medicamentos están empeorando tus relaciones sexuales con depresión, lo mejor es preguntar a tu médico por el tipo de medicamento que tomas, explica la Clínica Cleveland.
Esto puede resultar en:
- Un cambio de dosis del antidepresivo
- Cambio del antidepresivo
- Quitar el tratamiento con antidepresivos
Además, tu pareja tiene un rol importante en tu proceso para manejar el sexo con depresión.
De acuerdo a la Clínica Cleveland, a veces los problemas sexuales o de relación son los causantes de la depresión y no al revés.
Por eso, el psicólogo Eduardo Granja recomendó previamente en nuestro artículo sobre Los mitos de la depresión, acompañar tu tratamiento de antidepresivos con terapia psicológica. Así llegas a la verdadera raíz del problema.
Esto también contribuye a repartir la responsabilidad con todas las personas involucradas, explica Kimmel. Así expresan sus necesidades, reducen las presiones y crean un espacio de apoyo mutuo.
Otros consejos, de acuerdo al sitio médico Healthline, para llevar las relaciones sexuales con depresión, son:
- Toma tus medicamentos después de tener relaciones sexuales
- Haz ejercicio para estabilizar tu humor
- Pregunta a tu médico sobre medicamentos para la disfunción sexual como el viagra.