2022 ha sido un año complicado para las realezas del mundo. Se murió la Reina Isabel II y ahora Daddy Yankee, el rey del reguetón, se retira de los escenarios.
A sus 45 años, después de una carrera de más de tres décadas, el puertorriqueño (cuyo nombre real es Ramón Luis Ayala) le está dando la vuelta al continente en su gira final.
Se llama La Última Vuelta. Comprende 85 conciertos en 5 meses en los que recorrerá varios países de Latinoamérica y algunas ciudades de Estados Unidos.
Ecuador podrá verlo y cantar sus canciones en vivo, por última vez, el 5 de octubre en Quito.
¿A qué se debe el éxito de Daddy Yankee?
En sus inicios, allá a principios de los 90, Daddy Yankee se interesó por el rap, ese estilo musical conversacional, creado hace medio siglo en la década de 1970. Pero no se demoró en empezar a fusionar el rap con diferentes estilos, como reggae o hip hop y ponerle un toque latino. Así el puertoriqueño, se unió a una tendencia que entonces era solo ‘undeground’, aunque existía hacía aproximadamente una década, según el productor panameño ‘El Chombo’.
En su podcast LOUD, Ivy Queen, otra de las fundadoras del género urbano, cuenta que apenas surgió el reguetón la gente pensaba que solo sería una fiebre que duraría unos meses. Y aquí estamos, frente al fenómeno musical más grande e influyente del momento en todo el mundo.
Pero pocos saben que, como cuenta Ivy Queen, el reguetón, que surgió entre Puerto Rico y Panamá, era una forma en que los jóvenes negros y de barrios más pobres, se levantaban contra la discriminación y el rechazo social.
Este género, que se caracteriza, entre otras, cosas por su ritmo sencillo, casi siempre el mismo de hecho, pero muy, muy bailable, poca instrumentación y fusión de ritmos ha cautivado no solo a oyentes, sino a músicos que tradicionalmente se identificaban con otros géneros.
De la misma manera, el enfoque social con el que nació el género ha mutado. Ahora ya no solo se usa para protestar contra alguna inconformidad, la nueva generación de artistas canta sobre excentricidades, ropa de marca y carros caros.
Con el tiempo y la experiencia, a finales de la década de 1990, el Rey del género empezó a realizar colaboraciones con otros artistas.
Para 2004, el Big Boss, como también se lo conoce, lanzó su álbum Barrio Fino. Con este no solo se consolidó como fenómeno global, sino que se ganó el premio Lo Nuestro y el Latin Billboard. Además, su icónico single Gasolina, de ese mismo álbum, fue nominado para los Grammy y los MTV.
Desde entonces, el cantante, compositor y productor discográfico no ha parado. Ha sacado éxito tras éxito, convirtiéndose en un referente de la industria musical. Ha colaborado con reconocidos artistas, también representantes del género, así como con quienes recién buscan incursionar en la música urbana, impulsando sus carreras.
Hasta ahora, Daddy Yankee, cuyo nombre artístico surgió porque en Puerto Rico se le dice ‘Yankee» a quienes logran grandes hazañas, ha ganado 110 premios y más de 310 nominaciones. Todas sus canciones se convierten en un hit.
¿Cómo se mantuvo vigente durante 30 años?
Sin Daddy Yankee no hay fiesta, ya sea en Latinoamérica o en cualquier discoteca del mundo.
El reguetón ya es toda una industria y un referente cultural y de identidad latina. No es posible hablar de él sin mencionar a Daddy Yankee. Ya le da la vuelta al planeta: ha salido de la esfera latinoamericana para convertirse en un movimiento global. Ya es el género más escuchado de plataformas digitales. Solo en 2020, se escucharon 3.600 millones de horas de reguetón en Spotify.
De acuerdo con el periodista, escritor y también músico, Eduardo Varas, «Daddy Yankee es el Elvis Presley del género urbano». Lo califica así porque, reflexiona Varas, el cantante puertorriqueño tomó algo que si bien no fue su creación, se encargó de propagarlo por todo el mundo. Fue un embajador: no solo del género, sino de la cultura latina.
A Daddy Yankee se le atribuye dar ese primer gran paso para que el resto del mundo que no habla español, se dejara seducir por el dembow. «Es como si fuese una conquista a la inversa. Ir a Europa y llevarse todo. Daddy Yankee fue ese conquistador«, explica Varas. Por eso le dicen el Big Boss.
Una vez que la fórmula rap-hip hop se consolidó, empezó a experimentar con otras fusiones, como ritmos más electrónicos, notas de salsa, bachata, y toda clase de ritmos latinos que también han estado en tendencia. Así, el puertorriqueño logró apelar a un público más diverso que lo mantuvo activo y en boga.
De hecho, cada vez que un nuevo ritmo empieza a sonar, siempre ha sido cuestión de días para escuchar el éxito que DY sacaría para subirse, modificar y capitanear la ola. Siempre funcionó.
Así fue como creó lo que son ya verdaderos clásicos como Descontrol, Rompe, Llamado de emergencia, Lo que pasó, pasó y Ella me levantó.
El fin de las giras de Daddy Yankee es también el fin de una era. Pero permanecerá siempre como un precedente y referente del género urbano.
Spotify describe al artista como ese personaje que “constantemente ha impuesto tendencias e inspirado nuevas generaciones de reguetón y artistas latinos a lo largo de su carrera”.
Aunque ahora se despide de los escenarios, la música seguirá siendo parte de su vida. Desde afuera, se dedicará a impulsar las carreras musicales de nuevos artistas.
