Salieron al bar, se pasaron con las cervezas y las picaditas, pero llegó el momento más importante: dividir la cuenta.
Dividir la cuenta correctamente puede considerarse la octava de las bellas artes porque balancea a la perfección el pago justo por cada persona, también reparte para todos el gasto de los impuestos y sobre todo no rompe amistades creando momentos incómodos.
Pero si tú y tus amigos crean un caos tratando de repartir los gastos, no son muy buenos en matemáticas o juran que van a pagarle al que pone la tarjeta y nunca lo hacen, aquí te damos algunas recomendaciones.
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Pide cuentas separadas
Si definitivamente no te gusta la idea de compartir la cuenta, lo mejor es que avises a los meseros antes de empezar a pedir las cervezas, explica la Cooperativa federal de Luisiana.
La mayoría de veces el mismo mesero hará la pregunta. Pero si sientes que tus amigos se lo van a tomar de mala manera, puedes iniciar explicando que vas a pedir algo pequeño o que estás tratando de ahorrar y quieres llevar registro de cuánto gastas por noche.
Evita hacer reclamos que maten el mood como “no quiero compartir porque ustedes no me pagan”. Sólo evita el tema del dinero, antes de que se convierta en problema.
Usa una aplicación para dividir la cuenta
Si no separaste las cuentas a tiempo o el bar no te permite hacerlo y quedaron en que una persona paga para que luego le devuelvan el dinero, no confíes solo en tu cabeza.
A veces pensamos que podemos hacer cálculos matemáticos con tres cervezas encima, después no separas las cuentas y finalmente no terminas por avisar cuánto te debe cada persona.
Para esto, te recomendamos usar una app que divide la cuenta de manera proporcional entre varios amigos, para ti. Solo ingresa la cantidad de personas, ingresa lo que salió en la factura y por arte de magia sabrás exactamente cuánto te debe cada persona exactamente.
Algunas apps recomendadas son:
Toma la iniciativa
La experta en etiqueta Diane Gottsman explica que debes defender tus intereses, pero discretamente.
Para esto, si llega la mesera con una sola cuenta de todos su tragos, no preguntes o te quedes mirando a tus amigos para que te digan cómo dividir la cuenta. Dile directamente a la mesera “Gracias, con esta tarjeta/billete voy a pagar estas tres cosas”.
Así dejas en claro que no vas a compartir la cuenta y evitar resentimientos.
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Divide la cuenta antes de abandonar el restaurante
Las aplicaciones y las transferencias hacen mucho más fácil pagar las cuentas. Ya casi no existe la excusa de “es que yo solo tengo un billete grande, entonces te pago otro día”. Además, tus amigos seguramente tienen sus celulares a la mano.
Por esto, el experto en etiqueta Thomas Farley recomienda que dividas la cuenta y les digas a tus amigos el valor antes de salir del bar. La mayoría te van a transferir en ese momento y tú vas a quedarte tranquila.
Si por algo, tus amigos no te pagan en ese momento, no los acoses el resto de la noche pidiendo que te paguen. Dales un par de días y si no lo han hecho, escribe un mensaje directo como:
“Hola ___, solo quería recordarte que tu cuenta del sábado es de $20.00, te agradecería mucho si me puedes hacer la transferencia está semana. Te dejo mi número de cuenta.”
Si no te gusta la idea de escribir directamente a la persona, puedes mandar un mensaje general a su grupo de Whatsapp o decirlo para todos durante otra salida.
Pon atención a la orden
A veces, la orden de bebidas o comida es igual para todos y por eso deciden pagar el mismo valor por igual. Sin embargo, siempre hay alguien que ordena algo diferente. Por ejemplo:
- Una persona va a tomar y el resto no
- Una persona no va a tomar y el resto sí
- Todos van a compartir la comida, pero alguien por alergia o dieta, no va a poder comer todo el plato
En estos casos, la revista gastronómica Bon Appétit recomienda que preguntes a la persona cómo quiere manejar el pago. Tal vez decide separar su cuenta o entre todos deciden que esa persona ponga más o menos al final.
