Cuando Mark Zuckerberg lanzó la idea de un mundo virtual en 2021, sólo se habló de la posibilidad de conectar con nuevas personas y vivir experiencias que superan la realidad. Sin embargo, para las mujeres y adolescentes esta realidad virtual, llamada Metaverso, nunca fue un lugar seguro.

En el mismo año de su lanzamiento, la psicoterapeuta Nina Jane Patel fue acosada sexualmente en el Metaverso por un grupo de avatares controlados aparentemente por hombres, debido a las voces que se escuchaban. En su ataque, los avatares le gritaban insultos machistas, misóginos y denigrantes. 

La experiencia de Patel no es la única. Esta realidad virtual no parece tener políticas de seguridad para estos casos ya que a inicios del 2024 se reportó la violación en el Metaverso y fue a una menor de edad. 

Te contamos qué sucedió y por qué esto puede tornarse en un problema más grave a futuro.

 

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El caso de la primera violación en el Metaverso

De acuerdo al medio británico The Guardian, la víctima que solo fue identificada como una adolescente menor de 16 de años estaba en un juego de realidad virtual en el Metaverso cuando fue atacada por varias personas. 

La joven obviamente no fue agredida físicamente. Sin embargo, hay que recordar que estos avatares son controlados por personas de verdad que hacen comentarios con su propia voz, y sobre todo que la realidad virtual está hecha para que las experiencias sean inmersivas. 

En su artículo Una violación en el ciberespacio, o cómo un payaso malvado, un espíritu embaucador haitiano, dos magos y un elenco de docenas convirtieron una base de datos en una sociedad, la periodista Julian Dibbell explica que cuando una persona sufre una agresión sexual en el Metaverso o en una realidad virtual experimenta los mismo efectos psicológicos de una agresión sexual en la vida real. Por ejemplo, estrés, miedo, sudoración, latidos fuertes del corazón, ansiedad, y sobre todo el trauma por dicha experiencia.

Esto ha sido suficiente para que la Policía británica abra una investigación.

¿Por qué esto es un problema?

Cuando la noticia de la menor de edad salió a la luz, mucha gente comentó que no se podía tomar en serio porque no fue un abuso sexual real. Sin embargo, como te contamos, las víctimas sí experimentan el daño psicológico de una agresión.

Para Nina Patel, hacer caso omiso al trauma de esta joven es como decir que el cyberbullying no existe y no es dañino, porque al final, esos comentarios no son reales o porque vienen de personas desconocidas. 

Los efectos negativos de las redes sociales y experiencias virtuales han sido estudiados en numerosas ocasiones y se ha concluido que definitivamente pueden llegar a provocar ansiedad, depresión, y desórdenes alimenticios. 

Uno de los casos más famosos de las consecuencias del acoso online es el de la joven canadiense Amanda Todd, quien se suicidó después de años de agresiones y bromas porque alguien colocó sus fotos íntimas en Internet. 

El año anterior, en Colombia, una niña de 14 años se suicidó por el acoso de sus compañeros en redes sociales. 

Los niños de ahora son los futuros clientes del Metaverso, explica Patel. Los estudios creen que la siguiente generación pasará al menos 10 años en su vida en realidad virtual. Pero sin las regulaciones necesarias para que los niños puedan explorar esta tecnología de manera segura, solo los estamos exponiendo a nuevas formas de abuso

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