“¿Escupir o tragar? Esa es la pregunta”, dijo alguna vez Harry Styles. Bueno, Harry se refería a una comida horrible que debía probar durante un reto en el programa de James Corden, pero nosotros nos referimos a tragar semen.
Para tu buena suerte, la respuesta a esa pregunta es cualquiera de las dos porque tragar semen es usualmente muy seguro.
El semen es una mezcla de fluídos que el sexo masculino suele secretar cuando llega a un orgasmo. No siempre, puedes eyacular sin tener un orgasmo, explica el sitio médico, Medical News Today. El semen contiene agua, proteína, y pequeñas cantidades de espermatozoides.
Ninguno de esos “ingredientes” es dañino para la salud y se procesan como cualquier otra comida si alguien los ingiere. Sin embargo, sí existe una pequeña probabilidad de que no te siente tan bien.
En este artículo te contamos qué pasa si decides tragar semen y cuándo no deberías hacerlo.
¿Qué sucede al tragar semen?
La primera pregunta sobre ingerir semen que seguramente te haces es ¿a qué sabe? Pues, como te explicamos en nuestro artículo Mito o realidad: ¿comer piña mejora el sabor del semen?, el sabor del semen varía en cada persona y depende mucho de su salud y sus hábitos alimenticios.
De acuerdo al sitio médico Healthline, muchas veces el sabor es neutral, en otras será amargo y en otra ácido. Si es que huele como a pescado, tal vez es señal de una infección. Por eso siempre se recomienda usar protección para el sexo oral.
Algunos factores que alteran el sabor del semen hacia el lado más amargo pueden ser:
- Uso de drogas
- Tomar café
- Comer espárragos
- Fumar cigarrillos
- Tomar alcohol
Ahora hablemos sobre el mito más famoso sobre tragar semen; que es nutritivo por su cantidad de proteínas. De acuerdo a Medical News Today, esto no es cierto, ya que los niveles de proteína en este fluído son mínimos.
Eso sí, un estudio del 2002 descubrió que el semen puede tener propiedades antidepresivas y pueden mejorar tu estado de ánimo. También existe la creencia de que el semen da sueño, ya que al estar cargado de melatonina, la hormona que regula los ciclos de sueño, puedes sentirte cansada después de exponerte al semen.
¿Por qué podría ser riesgoso?
Como te dijimos anteriormente, tragar semen puede ser una forma de contraer una infección de transmisión sexual (ITS) como:
- Herpes
- Virus de Papiloma Humano
- Gonorrea
- Sífilis
Por eso si decides que es mejor tragar semen, Healthline recomienda que converses con tu pareja sobre su historial sexual y se hagan pruebas de ITS.
Además de las infecciones, otro riesgo que puede tener ingerir semen es descubrir que tienes una reacción alérgica. Sí, existe la alergia al semen y te contamos todo sobre ella en este artículo.
Esta alergia puede ir desde una simple picazón e irritación hasta una reacción que te puede mandar al hospital.
En conclusión, tragar semen es una elección personal que no tiene mayor riesgo, pero que sí debe hacerse con precaución. Si quieres hacerlo de manera más segura, puedes leer nuestro artículo Higiene para el sexo oral: una guía completa.
