Los ricos se visten como pobres, quieren trabajar en lugares “comunes” y quieren creer que son iguales a ti y a mi. ¿No nos crees? Veamos las últimas tendencias.
Comencemos con la más reciente del futbolista argentino, Rodrigo de Paul. De Paul, es el jugador de uno de los equipos más populares de la liga española, fue campeón del mundo en 2022 y aún así llegó a sus entrenamientos con shorts manchados, rotos y una camisa descosida.
View this post on Instagram
En agosto de este año nació un nuevo meme cuando los esposos Hailey y Justin Bieber asistieron a un evento vestidos totalmente diferente. Hailey, por su parte, fue elegante de pies a cabeza con un vestido rojo, y Justin se presentó en Crocs amarillos, con medias, shorts deportivos y sin camiseta.
@katebartlettand they both serve every single outfit 👏🏻👏🏻👏🏻♬ original sound – kate bartlett
Y cómo olvidar cuando la marca de lujo Balenciaga — con la que se visten J Balvin, Kim Kardashian o Taylor Swift— sacó a la venta unos zapatos deportivos rotos y sucios por casi 2 mil dólares.
Balenciaga’s new footwear. Has the aged sneakers trend gone too far? pic.twitter.com/PU8OHV0wBv
— SoleSavy (@SoleSavy) May 9, 2022
A su vez, el Internet de los mortales, o sea de el resto del mundo, está lleno de tutoriales y tips para vestirte “como si tuvieras dinero” o la estética Old Money de la que ya te contamos en nuestro artículo Estética Old Money: Todos quieren verse como millonarios.
Aquí te contamos de dónde nacen estas tendencias y por qué queremos aparentar lo que no somos.
Los ricos se visten de “pobres”: el origen
En el video ensayo del canal de cultura pop, The Take, se explica que desde siempre los ricos han tenido “fantasías” de vivir una vida corriente. Por ejemplo, la reina María Antonieta de Francia, recreó en sus palacios una granja para “jugar” a ser una persona de campo.
La moda, casi por naturaleza, es una forma en la que todos podemos jugar a ser un personaje. Podemos ser la chica romántica que solo usa vestidos floreados, la chica gótica que utiliza corsets y se viste de negro o, como la actual tendencia, la chica que se viste como si no tuviera dinero.
La primera razón por la que mucha gente millonaria opta por esta estética, de acuerdo a la investigación de la youtuber Alice Cappelle, es que lucir “de la calle” da un cierto tipo de credibilidad e identificación.
Como una manera de decir “somos ricos, pero sabemos lo que es vivir como tú y entendemos tus referencias”. Como hicieron Kim Kardashian y Kanye West en una sesión de fotos con su familia en una casa “pobre” y vacía como si fueran una familia clase media de los años 80.
Otra explicación a por qué los ricos se visten como pobres, es el poder, explica el crítico de moda, Pedro Mansilla, para el medio El País. Particularmente en los hombres heterosexuales que como Justin Bieber en el evento de su esposa pueden decir: “yo vengo como a mi se me da la gana y nadie puede hacer o decirme algo al respecto”.
Es una forma de rebeldía, llevar la contra y, sobre todo, demostrar que no tienen nada que probar.
La última razón está resumida en las palabras de la estilista de famosos, Ramee Randall, quien dijo en una entrevista para Refinery 29: “Lo visible solo existe basado en donde están las cámaras”.
Es decir, el outfit de tu celebridad o influencer favorito, nunca es su creación, siempre se importa de la calle. La diferencias es que las cámaras apuntan a Kylie Jenner, y no al barrio pobre en Bronx, Nueva York, del que Kylie sacó su estilo.
El problema de tratar a la pobreza como un fetiche
No te confundas, que los ricos se vistan como “pobres”, no significa que les guste la pobreza. Uno de los problemas más grandes de usar ropa que parece de clase media solo por “la moda”, es ignorar el valor funcional y cultural que tiene esa prenda para quienes la usan de verdad.
Por ejemplo, hace algunos años, las trenzas africanas eran consideradas un peinado para una estética gánster. Algunas personas que usaron estas trenzas fueron Miley Cyrus, Kendall Jenner y Kim Kardashian.
Ahora sabemos que las trenzas africanas no son solo un “peinado”, sino que tienen un significado cultural enorme para la población negra, que ha sido discriminada por usar sus peinados tradicionales. Pero cuando una celebridad blanca lo hace, se considera un “estilo atrevido”.
Otro ejemplo de la gente rica apropiándose de la estética “pobre”, pero rechazando su origen, son las trabajadoras sexuales. En su video ensayo, la youtuber Tee Noir, analiza cómo las raperas normalmente adoptan la estética de una trabajadora sexual con los tacones “de stripper” llamados Pleasers.
Sin embargo, las trabajadoras sexuales no usan estos tacones solo porque “se ven bonitos”. Los Pleasers están diseñados para aguantar largas horas de pie, son cómodos y tienen la punta en una forma específica para hacer giros fácilmente al bailar en un tubo.
Además, en sus letras, las raperas usan términos como prostituta y p*ta de manera despectiva, cuando literalmente están lucrando de su apariencia.
Entonces, sí, la gente rica puede lucir como pobre siempre y cuando no lo sea. Y qué importa si esos shorts rotos que usa De Paul hacen la diferencia en una noche fría para una persona que en realidad no tiene un hogar. Lo que importa es que se vea bien, hasta que llegue la siguiente tendencia.