Guardar la cerveza parece una actividad fácil ¿no? Solo se mete en la refri o se deja sobre la mesa. Igual ya te la vas a tomar más tarde.
Pero cuando abres la cerveza y explota, te la tomas y no puedes sentir las burbujas o sabe a metal, no maldigas a la marca de cerveza. La verdadera culpable puede ser tu forma de almacenar la cerveza.
En primer lugar, entre más tiempo guardes la cerveza, menos sabor y olor tendrá, explica el sommelier de cerveza Matt Simpson. Por eso es importante consumirla antes de su fecha de expiración, pero si no cuidas bien tu cerveza durante este tiempo, solo aceleras la decaída de tu cerveza.
Pero para no gastar todo ese dinero en vano y tener una cerveza fresca siempre a la mano, te dejamos unos tips de cómo conservarla correctamente.
Tip 1: Mantén tus botellas o latas quietas
No es ninguna noticia nueva que no hay que andar moviendo las cervezas porque al momento de abrirlas ¡puff!
Pero un error común, de acuerdo a la línea de electrodomésticos Whirlpool, es colocar la cerveza en la puerta de la nevera. Aunque el espacio parezca perfecto, la puerta se mueve todo el tiempo haciendo que tu cerveza pierda gas y no se conserve bien.
Por eso si las vas a poner en el refrigerador, colócala en una repisa donde no vayan a tener movimiento.
Tip 2: Almacenar la cerveza lejos de la luz solar
Así como el vino odia al sol, a tu cerveza fresca tampoco le gusta que la expongas a la luz. La razón de acuerdo al sommelier Simpson es que la luz produce una reacción química en la cerveza que hace que la cerveza tenga un sabor desagradable.
Solo media hora expuesta a la luz y tu cerveza cambiará de sabor, explica Simpson. Por eso guárdalas en un lugar oscuro, si no tienen opción mejor compra latas de cerveza ya que no dejan pasar la luz y si prefieres de botella, apunta siempre a las que tenga envase marrón.
Tip 3: Las cervezas van paradas
La distribuidora de bebidas Columbia Distributing, explica que la mejor forma de guardar la cerveza es con las latas o botellas paradas. En primer lugar porque de esta manera el líquido está en contacto con poco aire, si la recuestas, dejas más espacio para el aire interior.
En segundo lugar, la cerveza tiene unos residuos naturales que se van al fondo de la botella si la mantienes parada. Si la recuestas, estos residuos se quedan en el líquido cuando la sirvas en tu vaso.
Tip 4: Invierte en cervezas de larga duración
Si no eres de los que toma cerveza regularmente o te gusta tener tu refrigeradora llena por si acaso vengan visitas, debes tener en cuenta cuánto dura tu cerveza.
Como te explicamos en nuestro artículo Cómo identificar una cerveza dañada no todas las cervezas pueden esperar en tu refri y puede ser que caduquen rápido.
De acuerdo al sitio médico Healthline, si tu cerveza ‘expira’ (se pasa de la fecha de la botella), estos son los tiempos recomendados para tomarla:
- Cervezas pasteurizadas, selladas (normalmente las comerciales): de 6 a 8 meses pasada su fecha de expiración. Si la refrigeras, puede durar hasta 1 año.
- Cervezas artesanales o no pasteurizadas: consumir hasta 3 meses después de su fecha de embotellamiento.